martes, 11 de diciembre de 2007

Un viaje a través del Universo de Vietnam y The Beatles

Por: Alberto Zúñiga Rodríguez / betursus@yahoo.com.mx

El cine como disciplina artística o acto de comunicación pretende arrancar sentimientos a partir de su lectura en una sala. De eso no hay duda. Sigo creyendo que quien hace una película parte de un universo que desea compartir con el espectador, adentrándolo en él, haciéndolo verosímil, empatándolo con sus personajes y situaciones, o en todo caso, convirtiéndolo en cómplice de su ficción (como diría el propio director mexicano Arturo Ripstein, hasta él hace cintas para que sean disfrutadas). Por tanto, la comprensión de las imágenes y la emoción que provocan van en función de un profundo análisis de aspectos tan divergentes y opuestos como el lenguaje (sea cual sea), la interpretación de los actores, el humor del espectador de ese día, la fotografía, las condiciones de acústica y de exhibición en el recinto, el montaje, la música y demás elementos que conforman una percepción audiovisual que se reduce o decodifica al “simple” acto de sentir o como comúnmente lo denominamos: ver. Aunado a estas variables, el factor edad representa otro componente definitorio que en algunos casos está a favor o en contra de una cinta. Aterrizando en esto último, este es el caso de la reciente producción de la directora Julie Taymor, A través del Universo (Across the Universe, 2007), que según como se mire puede resultar prodigiosa y una verdadera obra cleptómana de sensaciones o meramente un filme que se remonta a los sesentas con música de Los Beatles, metidos con calzador en un guión, para narrar una historia de amor juvenil con la guerra de Vietnam como fondo dramático. De esas conclusiones, tampoco hay duda.
La proyección comienza con Jude (Jim Sturgess), un joven obrero británico que sentado en la playa al atardecer, nos sentencia sobre la posibilidad de volver a ver, o no, a Lucy (Evan Rachel Wood); una jovencita provinciana espectacular, pudiente y de quien resulta difícil no enamorarse, según sus propias palabras. La escena siguiente nos muestra un montaje paralelo entre el tópico sesentero de los bailes universitarios gringos (que hemos visto hasta el aburrimiento) y un antro underground británico para chicos “rockeros”, que con una combinación de planos entre un sitio y otro, los asistentes nos entonan la primera canción de 34 tracks míticos del cuarteto de Liverpool que más tarde escucharemos en sus más variados estilos e interpretaciones. No recuerdo el título de ese corte musical pero el advenimiento de este género en la cinta resulta inevitable. Al finalizar las respectivas fiestas trasatlánticas, nos encontramos ante dos parejas que se despiden y que encausan la acción a lo que será su directriz narrativa: Jude sale de Liverpool para buscar en Nueva York a su padre, a quien por supuesto jamás ha conocido y Lucy comienza a vivir la nostalgia de perder a su novio a causa de la guerra en Vietnam (que lógicamente morirá y que más tarde le conmoverá para convertirse en una militante de movimientos antibelicistas). Nada extraordinario hasta ahora. Por azares del destino imaginario de los guionistas (Ian La Frenais y Dick Clement) estos dos personajes se conocerán a través de Max Carrigan, el hermano mayor de Lucy, quien estudia en la universidad de Columbia, donde trabaja el papá de Jude; con estos tres ingredientes, la película aparentemente detonará en una historia de amor juvenil neoyorkina sin mayores atavíos que la excelente voz de los personajes; pero atención, quizá ya deban suponer a estas alturas que en algún momento Jude y Lucy se separan, que Max va a la guerra y el resto de la confrontación-resolución, mmm… lo puedan adivinar… y que como dijo John Lenon y se usa como eslogan publicitario: All you need is love.

(Fotograma de la Cinta Across the Universe, de Julie Taymor)

De A través del Universo se desprenden la denuncia sobre la guerra de Vietnam (trivial de alguna forma) y sutilmente la de Irak, el mensaje de paz y amor enmarcado en el universo beatle y el esfuerzo por “regalarnos” una historia reconfortante que rescata de la memoria (como si no lo hubieran hecho ya los gringos en los últimos 20 años) los movimientos juveniles antibélicos, los contraculturales y obvio, los musicales. Recordemos que no sólo el de los británicos está presente, sino otros propios como el de Jimmy Hendrix y Janis Joplin, que también tendrán su referente en dos personajes claves de la cinta: Jojo y Sadie, respectivamente. Para ahondar en estas “virtudes” (con comillas o sin ellas, ustedes decidirán), la directora de cintas como Frida (2002) o Titus (1999), echa mano de una puesta en escena coreográfica permanente, plagada de influencias plásticas que recurren a principios del surrealismo o impresionismo, y por supuesto, de otras obras fílmicas, que se delinean en las secuencias psicodélicas donde hacen su aparición especial Bono o Salma Hayek y que nos recuerdan necesariamente a una Pink Floyd The Wall (1982) de Alan Parker. Sí, Forrest Gump (Robert Zemeckis, 1994) también está presente, pero no es un musical. Veredicto final: que la vean quienes nacieron en los 60´s o disfrutan recordando de las canciones de Los Beatles porque la historia por sí misma, no es un viaje sorprendente (salvo algunas escenas muy específicas)...

Post data para este post (ventaja de leer on line y no en papel):
1. La directora defendió su corte final ante los ejecutivos de Estudios Revolution, quienes aseguraban que la película estaría destinada a la quiebra total y sería una especie de vergüenza para el estudio. Respuesta: Según el periódico Los Angeles Times el musical ha tenido un éxito rotundo en las nuevas generaciones, que al menos en California registran datos increíbles en su taquilla.
2. Dato preciso: El estudio tan sólo por las 34 canciones pagó 10 millones de dólares en derechos.
3. Julie Taymor también ha afirmado en varias entrevistas que estuvo tentada a ponerle como título "All you need is love", ya que ha estado en contacto con lo más profundo de su ser y esa frase es la conclusión a la que ha llegado, pero correría el riesgo de trivializarse. ¿Ustedes qué creen?
4. Por la cultura de drogas que presenta la cinta la catalogaron como PG-13 y su estreno oficial fue en Septiembre de esta año.
5. Sitio oficial: http://www.acrosstheuniverse.com/

Texto publicado el domingo 16 de Diciembre de 2007, en la columna semanal de cine Butaca Sinestésica RKO 281, del suplemento de cultura Letras de Cambio, del periódico Cambio de Michoacán.

1 comentario:

Lata dijo...

Amigo, pero qué buen post... el anterior no lo he leído, pero me gustó mucho. La verdad no me imaginaba la película así. Confieso que los musicales no me encantan... pero AMO a los Beatles... veremos si sigue en el cine la próxima vez que vaya.
:)
Un abrazotototote